El pedaleo de este fin de semana me trajo dos historias peculiares. Una de ellas resultó en una queja generalizada por el controvertido aumento de tasas, y la otra en un relato sobre un milagro que habría surgido por una promesa. Hoy, martes 7 de enero, les voy a contar sobre la queja.
La Asamblea de los Mayores Contribuyentes es un tema que me llamó la atención. Los Mayores Contribuyentes son vecinos presentados por cada bloque integrante del Concejo Deliberante (CD) para participar en asambleas que traten temas relevantes para la comunidad, como orden impositivo, presupuestario o endeudamiento.
Una característica particular de los Mayores Contribuyentes es que deberían ser los que aportan los tributos más altos. Sin embargo, parece que esta premisa no se cumple, ya que la elección de los mismos es netamente partidaria.
En estas asambleas, los concejales y los Mayores Contribuyentes sesionan simultáneamente y debaten la orden del día. Si hay un empate de votos entre los Mayores Contribuyentes (18 vecinos elegidos por los bloques), el proyecto en discusión debería volver a comisión para su modificación. No se permite el desempate por parte del presidente del CD.
Según un vecino que me instruyó sobre el tema, el año pasado el presidente del CD desempató y se tomó una deuda por $500 millones. Esto me dejó claro que los Mayores Contribuyentes tienen mucho que ver en la concreción de un impuesto.
¿Quiénes son los vecinos designados como Mayores Contribuyentes? ¿Alguien de ustedes, estimados lectores de «De Hoy», es o conoce a quien ostenta ese cargo? Deberíamos saber quiénes son, ¿no? Al fin y al cabo, somos los vecinos quienes vamos a erogar de nuestros salarios esa imposición.
Lo dejo a su criterio. En la próxima entrega, les contaré sobre una promesa por un hecho milagroso que ocurrió en nuestra ciudad.
Miguel Cozzaglio,
corresponsal colaborador del diario De Hoy