El Gobierno logró prolongar ayer la baja de los dólares financieros, y en especial la de blue aunque a un ritmo más moderado que en las jornadas previas, mientras que el Riesgo País prolongó su escalada y superó los 1.600 puntos.
De acuerdo al promedio de las cotizaciones de la City porteña, la versión “libre” o paralela de la moneda norteamericana cerró a 1.405 pesos para la venta (1.375 para la compra), con lo que la “brecha” con la cotización oficial mayorista, de 923,50, quedó en 52,14 por ciento.
Esa evolución marca una caída en la jornada de 10 pesos, lo que implica un ritmo bastante más moderado que en las dos rondas previas, cuando se desinfló 95 pesos.
Tras estas bajas, en lo que va del mes lleva un aumento de 40 pesos o 2,93 por ciento. En el año avanza 380 pesos o 37,07 por ciento.
En tanto, los dólares financieros también buscan su nueva zona y acumulan caídas mayores a los 100 pesos en cada una de sus variantes. En principio la estrategia del Gobierno parece haber sido exitosa para achicar la brecha, no así con el rendimiento de bonos y acciones.
El dólar MEP cayó unos 28,57 pesos o -2,19 por ciento, hasta los 1.278,97 mientras que el contado con liquidación lo hizo en 20,98 o -1,61, hasta los 1.285,99.
Para el caso de las cotizaciones financieras, la brecha cambiaria quedó ubicada por debajo del 40 por ciento.
Por su parte, el Banco cortó una racha compradora de cinco ruedas y hoy vendió 3 millones de dólares en el mercado.
En una rueda que tuvo un volumen operado de 201,63 millones de dólares, la autoridad monetaria tuvo que asistir la demanda de importadores. De esta forma en el mes acumula compras por 260 millones.
En tanto, respecto del Riesgo País, la marcada venta de activos bursátiles impulsaron el alza de ese índice a sus máximos en cuatro meses, llegando a los 1.608 puntos.
Los inversores dudan de la capacidad del Banco Central para seguir acumulando dólares y pagar el resto de los compromisos que debe asumir. Hoy las reservas caerán otros 650 millones de dólares, producto de un nuevo pago al FMI.
En las últimas horas la calificadora internacional de riesgo crediticio Moody’s advirtió que la migración de los pasivos remunerados del Banco Central al Tesoro Nacional que impulsa el Ministerio de Economía provocará una mayor exposición de los bancos a la deuda pública y a un mayor riesgo de liquidez. La consideración de la empresa, claramente, no ayudó al clima sobre los activos argentinos.
MERCADOS INTRANQUILOS
El blue moderó su baja y volvió a subir el Riesgo País
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