'Si nos hubiéramos dedicado a especular, tal vez hoy estaríamos bárbaro'

  • Viernes, 12 de Julio de 2019 | Locales

Alejandro González, gerente e integrante de la firma propietaria de Gobas Cereales, expresó que la empresa solicitará la apertura de un procedimiento preventivo de crisis para 'cumplirle a la gente' y 'parar con los intereses de los bancos'. Además, dio detalles del proceso de deterioro de dicha firma acopiadora, que desde hace dos meses se encuentra sin funcionar y cuyos empleados serían despedidos. También señaló que hubo intentos de venta de la empresa que resultaron fallidos ya que, en este momento, 'nadie invierte en algo productivo'.

El miércoles último, los empleados de Gobas se manifestaron en la puerta de la firma, pues no tenían precisiones acerca de la continuidad de sus fuentes laborales. Luego, en una reunión en la delegación del Ministerio de Trabajo, se les informó que la empresa se encuentra gestionando un procedimiento de crisis y dejaría de funcionar en forma definitiva.

En declaraciones que hizo ayer a Somos Chacabuco, González comenzó mencionados datos del propio gobierno nacional que afirman que en el país 'están cerrando 50 pymes por día'. En el caso de Gobas, afirmó que el proceso 'no se originó en dos días'. sino que se dieron 'varios factores'.

El primero de ellos, dijo, fue el cierre, hace más de un año, del molino Cuesta Colorada, dedicado a la elaboración de harina de maíz, que los propietarios de Gobas instalaron allá por 2002 en el Sector Industrial Planificado.

'Tuvimos que cerrarlo'

'En ese momento tratamos de hacer lo que dice todo el mundo, acerca de dar valor agregado a la materia prima', dijo, y agregó: 'El molino tuvo una etapa muy buena en la que se pudo exportar. Hace cinco o seis años, por el atraso en el tipo de cambio, los costos y la crisis global, el molino fue exportando cada vez menos'. Luego señaló que en los dos últimos años Cuesta Colorada 'trabajó a pérdida', a la espera de que 'se revierta la situación'.

'Eso no pasó y tuvimos que cerrarlo', dijo, y agregó que el molino llegó a ser el tercer exportador de harina de maíz del país.

'Hoy la Argentina no exporta un solo kilo de harina de maíz, salvo algunos molinos que hacen harinas especiales, pero el mercado de Congo y Angola, que era el que teníamos nosotros, se perdió todo. O sea, Argentina perdió todo el mercado por falta de competitividad', dijo, y agregó que las pérdidas de los últimos años de Cuesta Colorada le provocaron 'un problema grande' a Gobas. A eso, dijo, se sumó la 'pésima cosecha' de 2018, a lo que se añade que la actividad del acopio de cereales viene perdiendo presencia, ya que hoy muchos productores apelan a formas de comercialización más directas. Además, se ha generalizado el uso de silos bolsa, que permiten tener los granos guardados en el campo.

También habló de créditos tomados por la empresa, cuyos intereses de los últimos años 'fueron leoninos y usureros'.

'Los últimos dos años a las pymes nos estaban cobrando intereses de entre 7 y 9 por ciento mensual para el descuento de cheques. Eso es insostenible. Es lo que las pymes le venían alertando al Gobierno, pero lamentablemente no se corrigió', expresó.

González afirmó que a los empleados de Gobas se les adeudan los sueldos de junio y el medio aguinaldo, y hubo atrasos en los aportes sociales 'de los últimos meses'.

'¿Quién va a hacer una inversión productiva?'

Según dijo, una salida que se buscó fue la venta de la planta en la que funcionó Cuesta Colorada, pero no hubo ni siquiera un interesado.

'En este momento nadie invierte en algo productivo, porque si a la gente le pagan 50, 60 o 70 por ciento en plazos fijos o en bonos para no trabajar, ¿quién va a hacer una inversión productiva?', preguntó.

'Cuando vimos que el molino no se podía vender, intentamos vender Gobas, y durante mucho tiempo se negoció con una corredora de cereales con la que hace 30 años tenemos relación comercial, y la negociación quedó en stand-by hace dos meses, creo yo, por la situación que vive el país', afirmó.

Según dijo, la apertura de un procedimiento preventivo sería la manera de 'cumplirle a la gente' y 'parar los intereses de los bancos, que son una cosa de locos', además de 'proteger los bienes de la empresa'.

González consideró que el problema no fue de mala administración, sino de 'apostar a invertir'.

'Si nos hubiéramos quedado con el acopio solo, sin hacer una inversión para dar valor agregado a la producción, nada de esto hubiera sucedido. Los libros dicen que hay que dar valor agregado, hay que fabricar productos terminados y hay que salir al mundo, pero en la práctica eso te termina jugando en contra, porque tenés más estructura, más gastos, más personal y un día se te cierran las puertas, como se nos cerraron a no-sotros las puertas del mundo, por falta de competitividad o por lo que sea, y te tira para atrás', afirmó.

'Es una etapa horrible, pero estamos todos los días acá', dijo González hacia el final, y reiteró que 'tal vez fue una mala decisión' haber invertido en el molino. 

'Mirando hacia atrás, si nosotros no hubiéramos invertido un peso en un emprendimiento productivo y nos hubiéramos dedicado a la especulación, tal vez hoy, como todos los especuladores de este país, estaríamos bárbaro', finalizó.