Brasil superó por primera vez los 100.000 contagios de coronavirus en una jornada

  • Viernes, 26 de Marzo de 2021 | Mundo

Brasil superó ayer los 100.000 casos de coronavirus. Se trata de otro triste récord para el país más golpeado por la pandemia, que con estos datos ya suma 12.320.169 contagios desde que comenzó el brote. 

Según el boletín del Ministerio de Salud, este país registró 100.158 casos y 2.777 muertos por covid-19 en tan solo un día, lo que confirma el recrudecimiento de una crisis sanitaria que deja ya un total de 303.462 decesos en trece meses.

En tan sólo cuatro días, Brasil superó varios tristes récords. El martes rompió el umbral de los 3.000 muertos diarios; el miércoles sobrepasó los 300.000 decesos acumulados, y ayer registró la mayor cantidad de infecciones diarias desde el comienzo de la pandemia.

El fuerte repunte de casos –que los especialistas atribuyen al incumplimiento de las medidas de aislamiento por parte de la población y al surgimiento de una variante más infecciosa– ha llevado a los hospitales al colapso en parte del país, donde comienzan a escasear los medicamentos para la intubación de pacientes graves, así como el oxígeno.

El alza de muertes por covid-19, por su parte, ha aumentado la presión sobre el sistema funerario, principalmente en la ciudad de São Paulo, la más poblada del país, con más de 12 millones de habitantes.

Es por este motivo que la Alcaldía de São Paulo autorizó desde ayer los entierros nocturnos en los cementerios de la capital paulista, que contabilizó 143 muertos tan solo de covid-19 en las últimas 24 horas. A esa cifra se le suman las defunciones por otras causas y enfermedades.

Los horarios de los entierros fueron extendidos hasta entrada la noche en al menos cuatro cementerios de la ciudad, entre ellos el de Vila Formosa, el mayor de Latinoamérica, donde fueron instaladas torres de iluminación para facilitar el trabajo de los empleados.

Además del cierre de todas las actividades no esenciales, ya en vigor, las autoridades locales han decretado un festivo de diez días a partir de este viernes con el fin de restringir la circulación de personas y contener el avance de un virus que sigue fuera de control.

Una medida similar ha sido también adoptada por la Alcaldía de Río de Janeiro, cuyas playas y servicios no esenciales estarán cerrados para evitar aglomeraciones.