Falleció el expresidente Fernando de la Rúa: juventud, carrera política y caída

  • Miercoles, 10 de Julio de 2019 | Paí­s

Los restos del exmandatario fueron velados en el Salón de los Pasos Perdidos del Congreso Nacional desde las 14.00 hasta las 20.00 de ayer.

Luego, sus restos fueron trasladados a una sala de velatorios del barrio de Núñez, donde quedará en guarda hasta hoy. Desde allí, a las once de la mañana saldrá el cortejo al Parque Memorial, en Pilar, para su inhumación.

El exmandatario, de origen radical, había sido sometido a varias operaciones. En 2016 sufrió una afección en la vejiga, y en agosto de 2014 le realizaron una angioplastía y le colocaron dos stents. Un mes después, volvió a ser internado en el IADT (Instituto Argentino de Diagnóstico y Tratamiento) para una intervención programada. Ya había sido sometido a prácticas similares en 2001 y en 2010.

De la Rúa quedó marcado por la peor crisis política, social y económica de la Argentina de 2001, cuando tuvo que renunciar a los dos años de haber asumido la presidencia de la Nación.

Su gobierno empezó el 10 de diciembre de 1999, bajo el sello de la Alianza, una alternativa política que surgió después de diez años de menemismo. 

En 1996 se había convertido en el primer jefe de gobierno de la ciudad autónoma de Buenos Aires y tuvo una larga trayectoria como senador nacional.

 Juventud y carrera          política

Hijo de Antonio de la Rúa y Eleonor Bruno, Fernando de la Rúa nació en septiembre de 1937, en Córdoba, en el seno de una familia de clase media alta.

Su padre ejerció la abogacía y llegó a ser presidente del Tribunal Supremo cordobés, pero también se dedicó a la política desde la UCR y fue diputado provincial y ministro de Gobierno del gobernador Amadeo Sabattini.

Fernando estudió el bachillerato en el Liceo Militar General Paz y se recibió como abogado en la Universidad Nacional de Córdoba a los 21 años. 

En esos años comenzó a militar en el radicalismo. Luego, en 1963, se afincó en la ciudad de Buenos Aires y fue nombrado asesor jurídico del Ministerio del Interior, entonces a cargo de Juan Severino Palmero, durante la presidencia de Arturo Illia. Allí se ganó el apodo de Chupete por su aspecto juvenil.

En las elecciones nacionales de 1973, el Frente Justicialista de Liberación (Frejuli) arrasó en prácticamente todo el país, pero De la Rúa se impuso en la Capital Federal y llegó por primera vez al Senado de la Nación. 

Poco después, fue compañero de Ricardo Balbín en la fórmula presidencial que fue derrotada, con el 24 por ciento de los votos, por el binomio integrado por Juan Domingo Perón y su esposa, María Estela Martínez, que alcanzó casi el 62 por ciento.

Tras el golpe de Estado de 1976, dejó la política y volvió al ejercicio profesional de la abogacía.

Cuando se produjo la reapertura democrática, en 1983, intentó ser candidato presidencial por la UCR, pero la lucha interna le dio el triunfo a Raúl Alfonsín, que luego llegaría a la Casa Rosada. En cambio, volvió a ganar una banca de senador nacional por la Capital Federal, esta vez superando al peronista Carlos Ruckauf. 

En la Cámara alta, presidió la Comisión de Asuntos Constitucionales. Fue autor de la ley de habeas corpus, la ley contra la discriminación de las personas, la de trasplante de órganos, la de violencia en espectáculos deportivos, la de política indígena y la de pensión al viudo.

Sus diferencias con el alfonsinismo se hicieron más evidentes con el Pacto de Olivos entre Menem y Alfonsín que, en 1993, fue la antesala de la reforma constitucional de 1994, que entre otras cosas habilitó la reelección presidencial consecutiva y la inclusión del tercer senador nacional por distrito.

Pese a su oposición al Pacto de Olivos, De la Rúa terminó beneficiándose con la reforma de la Constitución, puesto que la ciudad de Buenos Aires dejó de ser un municipio con un intendente elegido a dedo por el presidente de la Nación y se transformó en ciudad autónoma. En 1996, De la Rúa se transformó en el primer jefe de Gobierno elegido por los porteños.

La Alianza UCR-Frepaso dirimió en 1999 la candidatura presidencial en una original elección interna abierta, en la que De la Rúa venció con el 62 por ciento de los votos a la postulante del Frepaso, la reconocida dirigente de derechos humanos Graciela Fernández Meijide. 

Para garantizar la unidad de la coalición, uno de los líderes frepasistas, Carlos 'Chacho' Álvarez, que cosechaba una elevada imagen positiva por su rebeldía ante el menemismo, fue el compañero de fórmula de De la Rúa.

La fórmula De la Rúa-Álvarez alcanzó el 48,5 por ciento de los votos contra el 38 del binomio peronista, integrado por Eduardo Duhalde y el cantante y exgobernador tucumano Ramón 'Palito' Ortega.