Vecinos expusieron quejas y necesidades
- Jueves, 25 de Abril de 2019 | Locales

Cuatro vecinos de nuestra ciudad pasaron anoche por la banca abierta del Concejo Deliberante. En la mayoría de las exposiciones plantearon reclamos e inquietudes relacionadas con la crisis laboral.
La sesión se realizó desde pasadas las 20.00 en el Patio de los Intendentes del Palacio Municipal y tuvo como primer expositor en la banca al artesano Raúl Márquez, que se refirió a una exposición que realizó en el Teatro Italiano que tuvo un final abrupto.
Posteriormente, estuvieron Héctor Centurión y Juan Sosa, que realizan tareas de barrido por el Municipio, por las cuales cobran 2.300 pesos mensuales. Finalmente, ocupó la banca el vecino Daniel Oromé, que planteó la grave situación económica que vive y la necesidad imperiosa de contar con un trabajo.
"Vergonzosamente
descalificado"
Márquez, que realiza artesanías en madera, contó que fue convocado para realizar una exposición de sus obras cuya inaguración sería el 8 de marzo pasado, durante un acto conmemorativo del Día Internacional de la Mujer.
"Lejos estaba de pensar que la muestra iba a formar parte de un acto político", dijo el vecino, en relación a la ceremonia mencionada, la cual, dijo, tuvo continuas alusiones hacia la gestión del intendente Aiola. Según señaló, su malestar ante ello lo planteó a la subsecretaria de Cultura, Celina Felice, que en los días siguientes habría decidido levantar las obras y suspender la exposición.
"Fui vergonzosamente descalificado, inferiorizado, usado y hasta censurado", expresó el artesano, para quien "con el arte y la cultura no se jode".
"Lo que busco es respeto", dijo también Márquez, y señaló que no tuvo ninguna respuesta sobre lo sucedido. Asimismo, expresó su desacuerdo con que se utilice el arte con fines político partidarios incluso del radicalismo, más allá de que es afiliado a la UCR desde 1958.
"Ganamos 2.300 pesos
y hasta tuvimos
descuentos"
Seguidamente, estuvieron en la banca abierta, en forma separada, Centurión y Sosa. El primero de ellos comentó que en 2015 integraba una cooperativa de trabajo y a fines de ese año, cuando asumió el intendente Aiola, se les pidió realizar tareas en el Corralón y en el área de Barrido, con la promesa de que serían incorporados a la planta permanente municipal.
Desde aquel momento y hasta hoy perciben mensualmente, a modo de retribución, un subsidio municipal de 2.300 pesos.
"Ganamos 2.300 pesos y hasta tuvimos descuentos. Yo he cobrado 1.500", afirmó el vecino, y agregó que un aumento que se les ofreció fue recibir gratis "la garrafa social".
"Nos clavamos tres años y medio barriendo por 2.300 pesos y aguantando a la gente que nos dice "ahora saben lo que es agarrar una pala"", dijo también Centurión.
El vecino también se refirió a expresiones de ediles de Cambiemos, quienes dijeron que los seis trabajadores que están en esa situación tambiénperciben 6.000 pesos mensuales por el plan nacional de capacitación que reemplazó al Argentina Trabaja.
"Igualmente, si fuera así, ¿quién puede vivir con 8.300 pesos?", preguntó.
En el mismo sentido se expresó luego Juan Sosa.
"Lo único que necesito
es trabajo"
Finalmente, Daniel Oromé se refirió a la situación de extrema necesidad que atraviesa, ya que no cuenta con trabajo.
Según dijo, en este tiempo "empapeló" Chacabuco con currículums presentados en comercios y empresas, sin obtener respuesta.
"No tengo nada que hacer. Lo único que necesito es trabajar", afirmó el vecino, que señaló las necesidades que tiene con su familia. La respuesta que recibió que su caso será tratado en una de las comisiones del Concejo y se pedirá la intervención de la Secretaría de De-sarrollo Social.
