El Ejecutivo Municipal y las direcciones de los gremios ATE y Sindicato de Trabajadores Municipales acordaron la paritaria de octubre de 2024 a marzo de 2025. Los aumentos son 8 por ciento en octubre, 7 en noviembre y 10 en enero. Lo demás son bonos en negro de porcentajes del básico que van decreciendo. «Golía marcha por el salario universitario, pero recorta el municipal», reclamó Enrique Chilano, del Partido Obrero.
La reunión venía precedida de un malestar creciente entre los trabajadores por la pérdida salarial. Vale destacar desde dónde parten estos aumentos. Por ejemplo, un recolector o un enfermero sin antigüedad cobran 300.000 pesos. Al final de este acuerdo, ni siquiera alcanzarán los 400.000 pesos, con una canasta de pobreza de 950.000.
«Golía condena a la indigencia al trabajador municipal. Si bien vende el acuerdo como muy positivo, los bonos en negro representan montos muy bajos y no van a los jubilados en peor situación», comentó Chilano.
Las direcciones sindicales, más allá del pataleo mediático, no llamaron a ninguna medida de lucha, mucho menos a asambleas masivas. Sumisas a Golía y cercanas al peronismo, dejan pasar el ajuste local.
«La salida es la organización por lugar de trabajo para debatir qué medidas de lucha tomar y los montos a pedir. Los municipales deben tomar en sus manos la lucha por su salario y reivindicaciones. Tenemos que lograr una nueva dirección sindical de los trabajadores independiente de cualquier gobierno. Planteamos un salario municipal de 950.000 pesos con ajustes por inflación, todos los aumentos al básico para los jubilados, y pase a planta de todos los tercerizados, precarizados y contratados», finalizó el miembro del Partido Obrero.
Partido Obrero Chacabuco-Frente de Izquierda Unidad