El exministro Guzmán, del Frente de Todos, tenía una inflación del 4,5 por ciento mensual y una brecha cambiaria (diferencia entre el dólar oficial y el blue) del 60 por ciento. El fracaso del peronismo por su sumisión al FMI, sus limitaciones burguesas generando una reducción en las condiciones de vida de la población trabajadora, sumado al reciente fracaso de Macri en el gobierno, generó un hartazgo tal que ganó un personaje como Milei. El camino de ajuste era tal que altos funcionarios económicos de Massa plantearon que, de ganar, el plan hubiera sido similar al del libertario. No fue TikTok.
Ya en el gobierno, Milei procedió a una devaluación del 118 por ciento del peso contra el dólar, provocó una recesión económica sólo comparada a la pandemia, un desastre natural o una guerra. Cayó el consumo, hay medio millón de despidos, promovió una reforma laboral que nos hizo retroceder cien años. Reprimió manifestantes e incluso allanó comedores populares mientras se robaron 6 millones de kilos de comida. Duplicó la indigencia llevándola al 18 por ciento y elevó la pobreza al 60 por ciento, en solo seis meses. Pero la hoja de la motosierra no alcanzó a todos, la bicicleta financiera deja ganancias siderales, los bancos se la llevan en pala, así cómo las multinacionales y también ganaron muchísimo las grandes locales Arcor, La Anónima, Mastellone, Pampa Energía, Loma Negra, etcétera.
Con la complicidad de la CGT y la CTA, que no movilizaron ni pararon de verdad, así como con el salvataje del peronismo, macrismo y radicalismo, el débil gobierno libertario logra avanzar a los tumbos. Al día de hoy, la inflación detuvo su baja (a causa de la recesión) y corre al 4,6 por ciento mensual y la brecha cambiaria nuevamente se encuentra en el 60. Es decir, estamos igual y a la vez peor que con Guzmán. El campo y el FMI presionan por una nueva devaluación (que significará una nueva disparada de la inflación). A la vez, se dispara el riesgo país y el mercado comienza a desconfiar.
En conclusión:
1- El plan motosierra libertario rápidamente demostró fracasar. Sólo plantean una ilusión de que lleguen inversiones rifando al país, sus recursos y empresas estatales. Nada de esto va a suceder, de continuar este rumbo, la recesión se va a profundizar y las mayorías trabajadoras van a caer en una mayor miseria.
2- De no haber una intervención de los trabajadores en los sindicatos y las calles para derrotar a Milei y sus cómplices, la barbarie capitalista encontrará una salida peor para nosotros.
3- El Estado presente burgués fracasó, la libertad de mercado nos lleva al tacho a los de abajo. La salida es la izquierda en la perspectiva de un Estado obrero, un gobierno de los trabajadores y una economía planificada en función de los de abajo. La plata para la deuda debe ir al desarrollo del país, la creación de puestos de trabajo y cubrir todas las necesidades de las mayorías trabajadoras. Comencemos por la huelga general para derrotar el plan de Milei y sigamos por no confiar en los anteriores que nos trajeron hasta acá.
Enrique Chilano,
Partido Obrero Chacabuco-Frente de Izquierda Unidad
